4/03/2015

¿Qué no pudiste?


Pudieron con el óxido de este barco que hace tiempo
se va a pique.
Pudieron con el desasosiego que asaltó mis venas
cada vez que una palabra sonaba más alta que otra o cuando
el mute se adueña de nuestras noches...
Pudo con el desconsuelo, el pesar y la congoja de mis días
agrupados en latigazos que solo me recordaban que dolías.
Pudieron a la contracción constante del corazón.
¿Qué no han podido hacer tus ojos? ¿y tu mirada?
Y tus manos que no tocan, acarician....y tu voz que me reclama.
Tus labios, tu cuello, tus mandíbulas, tu pelo, tu clavícula, tu olor.....
y todo lo perfecto que arma tu cuerpo...
No eres conocedora del puto milagro que eres pero este cuerpo astillado
te corresponde y si, sonrío.