Verde, azul, rojo.....
Colores primarios a los que nos acostumbramos a ver desde que somos infantes....
...nos habituamos a ellos sin querer, se nos acomodaban los luceros y nos limitábamos a darles el mismo uso en nuestros dibujos de la infancia
sin intención de salirnos de la raya, perfectamente coloreados....
Cuando crecemos nos afrontamos a otro tipo de colores que desconocemos pero que están ahí, los maletines de colores de niños mayores contienen más lápices y con distintas tonalidades "raras", preciosas pero extravagantes....peculiares....son mezclas de otros tantos colores, desconocidos quizás....
agradables a la vista pero que aun así no nos terminamos de acostumbrar, la mezcla, el cambio brusco al que sometemos a nuestras córneas....
¿Existen realmente esos colores? ¿ Son buenos y útiles para nosotros?
En ocasiones nos salíamos de la raya y apreciábamos colores hermosos....sin querer....sin intención...y quizás fueron los colores más hermosos que jamás habíamos visto.... Quizás mis primeros cambios a los que hice frente en la vida los sufrí viendo esas tonalidades y no lo supe.....
Porque los cambios inesperados, pueden lograr las mayores satisfacciones de la vida, de la vista o de la sonrisas....
pueden regalarte entusiasmo, vida, energía o ganas de respirar carcajadas constantes...
Porque los cambios fortuitos pueden llenarte el alma de sonrisas como ocurrió hace un año.....porque quizás fue uno de los cambios más lindos y radiantes que jamás haya experimentado....porque al colorear, desplazaron la mesa en la que lo hacía, mezclé sin querer los tonos que ponía a mi vida y apareció un color brillante, bello...radiante...apasionado...mágico....
Siento ganas de querer salir de la raya a propósito para ver que color aparece........hay pánico......
Mi incertidumbre voceará a la serenidad y a la risa a ver si se manifiestan....
