10/10/2014

Y al fin....dormir....

Comencé a dormir con la cabeza a los pies de la cama para comprobar si todo sentimiento de malestar que habitaba en mi interior se daba la vuelta.
Me equipé con casco armadura y escudo y luché contra pesadillas que atormentaban y paseaban cada noche por mi cráneo, arrastrando y estirando de mis cabellos.
Angustia y rabia se rindieron, dolor huyó.
Valentía se hizo con el triunfo y se armó de valor. Salió de mi caja torácica el fantasma atormentador que a diario me llamaba para destrozar lo cotidiano.
Hubo mil muertes aquella noche, pero yo dormí plácidamente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario