He limpiado la casa esta mañana, he abierto una bolsa de basura y tirado cosas que no me hacían falta, un paraguas con el mango roto que cada vez que lo coges te cortas y sangras…incluso un sombrero horrible que alguien me prestó y que nunca volvió a por él ni contestó a llamadas. He ido a entrenar, he sudado. Todo bien.
Aspiro a poder respirar sin que se me entrecorte la respiración, ni a sentir que me falta el aire, ni sentir que he llenado por la mitad mis pulmones.
Lo he conseguido.
Aspiro a que cada noche me den un beso cálido y sincero, lleno de amor y fidelidad, que no me haga dudar ni un segundo del amor que nos profesamos.
Lo he conseguido.
Aspiro a poder comprarme calzado si me hace falta, ropa y útiles, poder pagar mis facturas y si me apetece incluso un jamón del LIDL cuando se me antoja y volver a casa rebosante de felicidad en medio de una pandemia.
Lo he conseguido.
Aspiro a sentirme realizada por la labor que hago y con la que sustento mi vida económica cada mes.
Lo he conseguido.
Aspiro a poder dar un beso y un abrazo a mis padres después de esta pandemia, aspiro poder viajar y ver a los míos, a poder quedar a tomar un café y tocarnos, besarnos, olernos y abrazarnos.
Aun no lo he conseguido.
Aspiro a aspirar a algo más, siempre, porque nunca va a ser suficiente para mí ni para nadie.
He perdido casi 20 kilos desde Octubre a hoy, día 18 de Enero de 2021, pero siempre aspiro a perder más.
Hoy mi amigo si estuviera vivo cumpliría 35 años, así que “Viva la vida” ¿no?
No hay comentarios:
Publicar un comentario